Otra de las muchas cosas que
tengo que agradecer a Menchu en mi proceso de rehabilitación es su esfuerzo por
que la rutina familiar no represente un cambio significativo respecto a antes
de mi accidente.
Como buena madre que es, intenta
que los comestibles no noten diferencia respecto de cómo éramos antes.
En aras de ese objetivo, busca
actividades familiares a las que yo pueda acceder y que sean, además,
interesantes para los comestibles.
La última (17 al 20 de agosto) ha sido una excursión
al parque temático de Sendaviva, en el Reyno (ACESA dixit) de Navarra, cerca de Tudela,
población famosa culinariamente por sus cogollos de lechuga y sus
espárragos.
Está bien pensado este parque
para la diversión familiar además de presentar una gran variedad de animales
salvajes (tigres, leones, osos, lobos, cebras, linces, puercoespines) en semilibertad.
Soberbio es, además en
particular, el espectáculo de aves rapaces adiestradas
Con su oferta lúdica y de natualeza, el parque temático de Sendaviva se ha convertido en el lugar más visitado del Reyno de Navarra.
Aunque está bastante bien
adaptado para desplazarse en silla de ruedas, por tratarse de una zona
montañosa, las cuestas son bastante pronunciadas por lo que las subidas son un
auténtico reto para la persona que empuja la silla (en nuestro caso, Menchu).
Gracias a mi cada vez mayor movilidad, siempre que podía me desplazaba
caminando y ahorraba a Menchu la dura tarea de empujarme. Asimismo, en las
bajadas frenaba con los pies y le evitaba el esfuerzo de retenerme.
Como Menchu ejerce de Madre los 86.400 segundos del día , en uno de los desplazamientos realizados en el camión de transporte, coincidimos con una familia de varios niños,A la hora de bajar, mi silla de ruedas plegada bloqueaba el paso y Menchu dijo:Primero los niños. La mamá que los acompañaba dijo: Eskerrik Asko. Hasta unos minutos después no caí en la cuenta de que debía haberle respondido:De nada.
Como Menchu ejerce de Madre los 86.400 segundos del día , en uno de los desplazamientos realizados en el camión de transporte, coincidimos con una familia de varios niños,A la hora de bajar, mi silla de ruedas plegada bloqueaba el paso y Menchu dijo:Primero los niños. La mamá que los acompañaba dijo: Eskerrik Asko. Hasta unos minutos después no caí en la cuenta de que debía haberle respondido:De nada.
Adolece no obstante el sistema de transporte interno de falta de accesibilidad para las sillas de ruedas.
Consecuentemente, de haber llevado mi farolítica silla autopropulsada de color rojo ferrari, habría tenido igualmente problemas para desplazarme.