lunes, 8 de abril de 2024

Otro pasito p`atrás

Comenté hace tiempo un retroceso sufrido en mi proceso de rehabilitación. En aquella ocasión (septiembre de 2013) me lamentaba de mis pérdidas urinarias durante la noche que presagiaban mi regreso al uso del pañal o del colector y manifestaba mi disgustopor ese posible retroceso, Hoy vengo a contar algo equivalente y es mi continuado proceso de caídas que me impiden continuar con gran parte de la rehabilitación. Tanto es así que esta misma semana ( del 2 al 5 de abril de 2024) me la he pasado en urgencias del hospital clínico. Tras mis múltiple ca´çidas Menchi se había asustado consideranfo la posiobilidad de que se hubiera producifo alguna avería o atasco en mi válvula de derivación ventrículo peritoneal (vdvp) En urgencias me hicieron todas las pruebas pertinentes descartando todo lo descartable pero con la duda de si el anticoagulante que tomo para evitar los coágulos que me provocan las frecuentes embolias (ICTUS y TEP incluídos) pero tras un segundo TAC concluyeron que los beneficios del anticoagulante superan los potenciales riesgos de una hemorragia cerebral. Sin embargo, sí he retrocedido en cuanto agilidad y movilidad. Sea cual sea la causa he regresado a la época en que tuve que reaprender a caminar sin silla de ruedas y soportadfo sólo por férula y bastón. Se acabó por tanto para mí lo de caminar tranquilamente por casa y por la calle sin ayuda externa Me tranquiliza pensar que igual que aprendí a caminar en la uen, puedo volver a aprenderlo ahora. Otra cosa es subir y bajar escaleras, cosa que yo ya daba por superada. Se observa por tanto que el proceso de rehabilitaci ón queda muy lejos de quedar concluído una vez comienzas a caminar. Los paseos de 30 minutos a trace y las subidas y bajadas del autobús tendré que reaprenderlos como si nunca los hubiera hecho. Afortunadamente, en sus estudios de fisioterapia ha aprendido una técnica para levantar a hemipléjico dek suelo, cosa que me tranquiliza mientras estoy en casa pero sigue preocupándomemi recién adquirida facilidad para irme al suelo. Al menos en este tiempo he aprendido a caer bien haciéndome el mínimo daño posible.
No obstabte, una vez he perdido el equilibrio, me voy al suelo sin remedio.Téngase pues en cuenta que mi teoría de que un afectado por ictus puede volver a caminar pasados dos años y tres meses del ictus aun contando los tropiezos del proceso de rehabilitación, no se corresponde con la realidad, pues, como vemos en este caso, pueden haber retrocesos de meses Después de este contratiempo tendré que regresar a la época en que recorría toda la casa hasta que mi pierna izquierda se tornaba capaz de soportar mi peso.

Comentarios y entradas