Uno de los temas recurrentes de conversación que he mantenido a lo largo de estos años de convalecencia han sido las frases y citas célebres.
Ahora, que acaba de terminar el Mundial de fútbol, creo que es un buen momento para recordar algunas de ellas.
Esta vez se cumplió aquello de que el fútbol es un deporte donde juegan 11 contra once y al final ganan los alemanes.
Tiempo atrás, esta cita fue parafraseada por un compañero del equipo de fútbol de papás (Walter A. (miedo en alemán)- diciendo que al final, lo mejor son las crónicas de nuestro portero, Joan).
Acaso como ejercicio de estimulación cognitiva, yo intentaba recordar batallitas de mi vida profesional.
Una de ellas es que tenía un alumno chino, el cual acostumbraba a seguir la clase con un libro abierto encima de la mesa escrito en chino con sus ideogramas.
Eso provocaba que en ocasiones que yo explicaba cosas sumamente complejas, las caras de los alumnos eran de completa perplejidad. Entonces me giraba a ellos y les decía Chino ¿no? y acto seguido miraba al alumno chino y le decía:”disculpa es una forma de hablar”, a lo que él sonreía.
Supongo que por obvias razones, nunca hablábamos de ictus sucedidos a otras personas, las cuales habían tenido menos suerte que yo y no lo habían podido superar.
No ha sido hasta mucho después que me he enterado de otros casos, algunos sucedidos en tiempos muy próximos al mío.
Yo no recuerdo haber oído el término ictus antes de que me pasara.
Sí había oído el término infarto cerebral por el sufrido por el podólogo real.
La primera vez, creo que fue cuando Luis, hermano de Menchu y cuñado mío, me trajo el libro
“Un minuto de lucidez” en el que la doctora Jill B. Taylor relata el por ella sufrido y que sus extensos conocimientos de neuroanatomía le permitieron experimentar como un caso práctico de estudio.
Con mi hermano Ignacio, siempre sacábamos a relucir alguna cita célebre.
Una de las que mejor recuerdo es aquella que dice que somos dueños de nuestros silencios y esclavos de nuestras palabras.
Eso es algo que procuro tener presente cada vez que redacto una entrada para este blog o un comentario para los blogs que sigo.
Una de las citas que yo solía recordar en aquellos tiempos era la de Yoda: Hazlo o no lo hagas pero no lo intentes de la que ya hablé aquí hace tiempo.
Para no dejar de hablar de mí –como siempre-comentaré que este fin de semana (14 y 15 de julio) hemos ido a Cambrils a llevar a los comestibles y a Peny para que estén con sus abuelos. No nos bañamos en la playa porque había demasiado viento.
Después de la final,
Menchu y yo volvimos para casa
Dejando allí a los comestibles con su perrita
En el largo viaje de regreso, comenté a Menchu que, durante el partido, su padre me había estado contando historias tristes de cuando peor había estado en el hospital.
Una y otra vez, los facultativos le iban diciendo: De esta noche no pasa. Ya hemos hecho todo lo que se podía.
Menchu me respondió: Cuando la vida nos ha golpeado, realmente lo ha hecho con dureza.
Aunque no lo mencionó estoy convencido de que también estaba pensando en su tercer embarazo, que acabó en tragedia porque la criatura presentaba trisomía 8 completa, incompatible con la vida .
La buena noticia es que, aunque nos haya golpeado con dureza, nos ha golpeado pocas veces.
Pudo habernos golpeado ayer mismo al entrar en Barcelona por la Diagonal, ya que, al tratarse de una avenida de sentido reversible, un coche salía por la autopista AP2 por el mismo carril por el que entrábamos nosotros.
Como ambos circulábamos por nuestra derecha, el susto no pasó de ahí pero queda demostrado que la reversibilidad de la Diagonal no está bien señalizada (u organizada) porque provoca que haya coches que accedan a la autopista AP2 en sentido contrario.
Supongo que el vehículo que se nos cruzó siguió avanzando de la misma manera hasta que se dio cuenta o hasta que colisionó frontalmente con algún otro vehículo que ya no iba por su derecha sino por el carril izquierdo dirección Barcelona.
No me consta que esta madrugada se haya producido ningún accidente de este tipo en la AP2.
Si así fuera, podría testificar que yo ya me había cruzado con ese vehículo justo a la entrada de Barcelona.
En este caso, no podemos decir al Ministerio de Fomento aquello de “No podemos arreglar las carreteras por ti”; habría que avisar al Ayuntamiento de Barcelona que mejore la señalización del carril reversible de la Diagonal. No es aceptable que una avenida que desemboca en una autopista provoque que los coches accedan a tal autopista en sentido contrario.
)
De todos modos, la cita que más me ha gustado es una que escribió mi hermano Manuel hace unos meses en su muro de Facebook a raíz del triunfo de la selección española frente a la portuguesa en la Eurocopa de naciones de Polonia-Ucrania: Creo que ahora que acaba de terminar la celebración de un Mundial de fútbol resulta muy apropiado recordarla.
Cuanto más incompetente es la clase política de un país y más atontados están sus ciudadanos, más éxitos futbolísticos tiene. Por eso la España de Zapatero fue campeona del Mundo.