Muerte bajo demanda (MoD)

 

Aunque oficialmente denominada ley de eutanasia, la recientemente aprobada ley de suicidio asistido y selección artificial me ha traído a la memoria mi última etapa profesional como ingeniero de Sistemas.

Especializado en impresión digital, estaba por aquel entonces de moda la impresión bajo demanda (PoD) por sus siglas en inglés.

Cualquiera que haya trabajado en una imprenta sabe lo caro que resulta producir el primer ejemplar de cualquier edición.

Por otro lado, si se imprimen muchos más ejemplares de los que se pueden vender, el almacenaje de los mismos puede resultar más costoso que su producción.

Es por eso que librerías especializadas y grandes superficies ofrecen periódicamente saldos de libros a precios tremendamente inferiores a los que tenían cuando estaban en las librerías (descuentos de hasta el 90%).

De ahí la necesidad de confeccionar únicamente la cantidad de libros exacta que se van a vender. Y eso es algo que sólo puede hacerse con tecnologías digitales.

El libro físico de toda la vida sigue teniendo entusiastas defensores no sé si por cuestiones románticas o porque les resulta más cómodo de leer que el libro electrónico.

De lo que no hay ninguna duda es de que la calidad de las imágenes es muy superior en el papel impreso que en una pantalla por muy alta resolución que tenga.

En mi caso no obstante, mi hemiplejia izquierda me impide manipular los libros físicos y me exige leerlos siempre sobre una mesa o soporte equivalente.

Imagino que, al igual que el resto de leyes, la de suicidio asistido también ha sido redactada por los becarios del legislativo con lo que estará llena de lagunas que habrá que ir corrigiendo.

Como viene siendo habitual, tales lagunas irán siendo enmendadas por el Tribunal Constitucional (TC) a lo largo de los próximos años hasta que quede en un formato casi definitivo.

Si mantenemos el criterio de acronomizarlo conforme a la terminología inglesa nos quedará DoD(death on demand) o mejor, (MoD) (Murder on Demand) que tiene una connotación de asesinato (murder).

Conforme a lo que he dicho en el párrafo anterior, supongo que en su redacción actual , la ley MoD obligará a los médicos a ejercer de verdugos de personas incapacitadas para decidir sobre su vida pero que, cuando estaban en perfecto uso de sus facultades habían manifestado su deseo de no seguir viviendo en caso de llegar a la situación a la que finalmente han llegado.

Cuando explico el caso de senilidad del señor Miquel del que hablaba el otro día, todo el mundo me responde que, para estar así, preferiría no estar.

Probablemente el mismo señor Miquel pensaría igual cuando aún estaba en condiciones de hacerlo.

Sin embargo, a día de hoy, ni el señor Miquel ni ninguno de mis compañeros de terapia que están completamente p'allá pueden estar en condiciones de decidir si quieren seguir viviendo en su patético estado o mejor prefieren irse para siempre.

En mi caso, he llegado a la conclusión de que el día que ya no sea capaz de resolver una integral por parte, mejor  me voy.

Hubo un tiempo en que, cuando me encontraba con una ecuación de segundo grado, en lugar de aplicar la fórmula para resolverla, me dedicaba a deducir la fórmula.

Tenían que ser mis alumnos quienes me parasen diciendo:¿pero qué haces si es una simple ecuación de segundo grado?

Llegará el día que no sólo no seré capaz de deducir la fórmula sino que ni siquiera seré capaz de recordarla y aplicarla.

Cuando estaba en la Guttmann, cuando los enfermeros se enteraban de mi pasado profesional de profesor de Matemáticas, me preguntaban esa fórmula para ver si aún me acordaba.

Cierto que España encabeza a nivel mundial  el número de transplantes de órganos y que nos gustaría conservar esa envidiable posición.

En el caso particular de un Estado catalán separado del Reino de España no me cabe ninguna duda que el argumento   de la catalanidad o no del sujeto será el argumento más importante para decidir darlo de baja.

Es por eso que me gustaría que la ley aclarase  si la necesidad de disponer de un órgano  del candidato a ser finiquitado  puede ser argumento a favor de darlo de baja o que, por contra, tal argumento no debería ser tenido en cuenta.

Pongo esta reflexiónsobre la eutanasia del conocido blogger Jaume Vives. Trabajador humanitario en países en conflicto