martes, 18 de octubre de 2011

ANALOGÍA CON WINDOWS

El otro día explicaba lo que me pasa a unos amigos informáticos haciendo una analogía con Windows. Los periféricos están bien y las conexiones también pero falla a nivel de placa madre:”Este programa no responde:
 Puede cancelar o ejecutar de nuevo”. El programa había sido codificado para un procesador que ya no funciona igual. Lo que hay que hacer siempre es ejecutar de nuevo: Algún día funcionará. Cada noche reinicio el sistema cuando me voy a dormir.
En mi cerebro se ha borrado parte de la microprogramación que había en unas E- PROM del Chip-set del procesador en la placa madre.
Es justo la parte del procesador que controla los periféricos del lado izquierdo: Extremidades superiores e inferiores.
A base de ejecutar de nuevo, algún día encontraré en el disco duro el driver adecuado para gestionar el periférico.
Por falta de uso, los periféricos mecánicos se van oxidando y ganando espasticidad. La solución para tales problemas es puramente mecánica. Eso se soluciona con fisioterapia y toxina botulínica. A día de hoy no existen fármacos para rehacer las conexiones neuronales dañadas. Los expertos, no obstante, aseguran que la parte del cuerpo ahora no controlada por el cerebro dañado puede llegar a controlarse con la parte de cerebro que sí funciona” abrir con otro programa” diríamos en Windows.
Las opciones de “buscar en la red” o “ayuda” no existen aquí.
La semana pasada tuvimos una cena de Físicos También allí me fue útil el símil para explicar a los ex-compañeros lo que me pasa: Los periféricos (músculos) están bien pero tengo un fallo a nivel de las E-PROM del chip-set del procesador central. Es un fallo en la placa madre que gobierna los músculos y que no da las instrucciones necesarias para que los músculos se pongan en movimiento.
Por lo que he leído de neurología, el cerebro puede llegar a reconstituirse y que la parte dañada sea sustituida en sus funciones por la parte aún sana.”Abrir con …” diríamos en Windows.
Es como si controláramos la impresora mediante la placa de video ya que el controlador de impresoras no funciona adecuadamente.
Diferente es una lesión medular, donde la avería se produce a nivel del BUS de datos.
El procesador da las instrucciones correctas pero tales instrucciones no llegan a su destino por una avería en su transmisor (médula espinal).
Una lesión cerebral es un fallo a nivel de placa madre que deja de efectuar su labor de gestionar determinados controladores de periféricos


jueves, 13 de octubre de 2011

Aniversario de Boda

Hoy es 13 de octubre y por tanto el aniversario de Boda de Menchu y mío. Como nos casamos en 1990, cumplimos 21 años.
La verdad que el tiempo al lado de Menchu pasa muy rápidamente pues la convivencia con ella es sumamente fácil. No sé si ella puede decir lo mismo de mí. Lo dudo, pues yo siempre he sido bastante arisco, y creo que aún lo soy más desde mi accidente.
El año pasado cumplimos los 20 años, que creo que se llaman bodas de porcelana .
Para nada se cumplen en nosotros los tópicos de hastío y cansancio del matrimonio.
Ambos estamos convencidos de que si volviera a repetirse la situación, volveríamos a casarnos sin dudarlo.
Siempre le digo que ella es lo mejor que me ha pasado en mi vida, aunque nuestros hijos – a quienes me refiero en este blog como los comestibles- representan también un acontecimiento transcendental en nuestras vidas.
Mucho tuvimos que esperar a que llegara el primero – Carolina- y esa espera de 10 años sí que hizo sufrir mucho a Menchu.
Aún recuerdo cómo lloraba de emoción en la cocina cuando se hizo la prueba de embarazo y le dio positivo.
A nivel físico, Menchu es preciosa. Es como el marisco de primera categoría que puedes comer todos los días sin llegar a cansarte nunca.
Aunque casi todo han sido luces en estos 21 años, lamentablemente también hubo alguna sombra. La peor, creo que ella estará de acuerdo conmigo, la pérdida del que tenía que ser nuestro tercer hijo, un 5 de enero de 2005.
Mi accidente también ha hecho mucho daño a Menchu y a los comestibles, pues se ve que me dieron por desahuciado en varias ocasiones. Yo en cambio, no me enteraba de nada y sólo es ahora que tomo consciencia de lo sucedido. Ése es otro de los motivos para escribir este blog: Recapitular de algo  de lo que prácticamente no me enteré.
Las virtudes de Menchu son sobretodo intelectual y espirituales.
Como persona, es encantadora y su compañía sumamente agradable.
Últimamente me trago un montón de programas de televisión que ningún interés presentan para mí pero me permiten estar a su lado.
Y es que estar a su lado ya es en sí mismo un placer que compensa la vaciedad de la tele-nada.
Sólo le pido a Dios que dentro de otros 21 años podamos celebrar nuestro 42 aniversario, acaso con algún nieto.

A pesar de los años transcurridos y de los embarazos, su cuerpo sigue resultando muy atractivo y deseable.
Contado en días, el 13 de octubre de 1990 fue el día juliano DJ=245848 y hoy es DJ=2448178 lo que da una diferencia de 24818178 días de feliz convivencia con Menchu. Cuando aún no teníamos hijos, yo le preguntaba: Cuando tengamos hijos ¿me seguirás queriendo? Y me contestaba: Más, porque entonces serás, además, el padre de mis hijos.
El tiempo le ha dado la razón porque eso es lo que a mí me sucede.
Quiero a Menchu por lo mismo que siempre pero, sobretodo, por ser la madre de mis hijos y eso la convierte, probablemente, en la persona más querida por las personitas a quienes más yo quiero.
Menchu y yo junto a la Hermita de Sant Bernat (parque natural del montseny), donde contrajimos matrimonio un lluvioso 13 de octubre de 1990

En la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, prometo amarte y serte fiel todos los días de mi vida.

martes, 4 de octubre de 2011

Contento de estar vivo


Hoy he tenido visita de revisión con el Dr. Chamorro, jefe de servicio de Neurología del Hospital Clínic de Barcelona. El Dr. Chamorro es uno de los neurocirujanos que me operó el cerebro a cráneo abierto.
Hace más o menos un año ya tuve visita con él y dictaminó que yo presentaba carácter plano. Hoy me ha visto mejor.
Le he recordado que hace un año me preguntó si estaba contento de estar vivo y mi afirmativa respuesta le dejó perplejo.
Desde luego, tengo muchas razones para estar contento de vivir: Ver crecer a los comestibles o compartir mi vida con Menchu y sentir el cariño de tantas personas que me apoyan son razones de sobra para vivir.
Mis limitaciones de movilidad no representan para mí ningún motivo de amargura o frustración que me quiten el amor a la vida.
Por otro lado, no siento ningún tipo de dolor físico y creo tener mi intelecto igual de bien –o de mal- que lo tenía antes.
Todavía soy capaz de resolver los problemas de Cálculo del que era profesor y soy capaz de comprender los artículos científico (o papers) que escribía cuando desarrollaba actividad investigadora así como la bibliografía asociada.
En mi e-book he cargado varios pdf’s de artículos científicos y el de mi tesis doctoral  que releo periódicamente para no olvidar las cosas que ya sabía.
Además de escribir este blog, se pueden hacer muchas otras cosas desde mi silla de ruedas

Carolina y Santi, los comestibles
Portada de mi libro favorito y que, a pesar de todo lo sucedido, sigo en condiciones de comprender
La dinámica de sistemas estelares es un campo de estudio apasionante al que aún me puedo dedicar.
Si a eso sumamos una familia encantadora, es normal que me sienta feliz como estoy.

FE DE ERRATAS:
El Doctor Chamorro sí es el jefe de servicio de neurología del hospital Clínic pero él no llegó a operarme.
La visita anterior con él no la tuve hace un año sino hará unos 6 meses.
Sí es cierto que entonces le dije: ”prefiero estar como estoy que no estar”.
Adendum
:En este video el Doctor Chamorro nos explica qué es un ictus

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