En previsión de esta ausencia, celebramos la onomástica en casa el pasado lunes, 4 de julio.
Ayer al marchar, Santi me dejó un hipopótamo y unos gogos para que yo pudiera jugar durante su ausencia. Lo cierto es que Maricela los ha recogido y no sé dónde los ha guardado, así que no puedo jugar.
Bueno, ahora me los ha traído y los he dejado encima de la mesa del despacho, así que puedo jugar mientras escribo.
Bueno, me falta una mano para poder jugar y escribir simultáneamente.
Normalmente echo de menos la mano izquierda paraotras cosas menos inocentes. Ahora noto otra limitación más inocente: Jugar con un gogo en la mano izquierda mientras escribo con la derecha.
Tal y como explico en la entrada correspondiente, el pasado 21 de mayo fue el cumpleaños de Carolina.
Puesto que Carolina nació el 21 de mayo de 2001 y Santi el 7 de julio de 2003 se da la casualidad que se llevan 111 semas o, lo que es lo mismo, 777 días. Ambos nacieron en lunes en la Clínica del Pilar de Barcelona y ambos sobre las 7h30.
Santi,alias Minimán (el superhéroe pequeñito), hace unos días.
HOLA SANTIAGO.- SEGUN TU DICES ERES UN MAGREADOR POR LO CUAL TE FELICITO, PERO DEJA TRANQUILAS LAS TETAS DE TU MUJER Y NO LAS EXPONGAS "POR ESCRITO" EN ESTOS MEDIOS, QUE SABES MUCHO MEJOR QUE YO QUE ESTA AL ALCANCE DE TODOS. LO QUE TU HAGAS CON ELLAS A NADIE LE INTERESA.
ResponderEliminarME ALEGRA SABER QUE CELEBRASTE EL CUMPLEAÑOS
DE TU HIJO, EL CUAL SE LLEVA SOLO UNOS MESES CON EL DE CAROLINA.
LOS MIOS -COMO DIGO YO- SE LLEVAN DE DIFERENCIA UNA ESPECIE DE CONDENA, TRES AÑOS, DOS MESES Y UN DIA.
UN FUERTE ABRAZO.
ESTA AL ALCANCE DE TODOS.
Gracias Manel por tu comentario. Llevas razón con lo de contar intimidades. Lo voy a borrar de la entrada.
ResponderEliminarUn abrazo.
Santi
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ResponderEliminarGracias Manel por tu sabia observación. Habrás visto que ya he borrado las expresiones malsonantes. Pero ya que fue pública la exposición, públicas también han de ser mis disculpas por expresarme de tan soez manera.
ResponderEliminarDisculpas que pido públicamente, en primer lugar, a mi amada esposa Menchu por frivolizar sobre aspectos íntimos que sólo a ella incumben. Disculpas también a mis hijos por avergonzar a su madre. Y disculpas a mis lectores por haber utilizado expresiones que pueden herir la sensibilidad de las buenas y educadas gentes.
Como persona, es mi obligación ser respetuoso con todo el mundo pero, sobre todo, con las personas que me quieren, que son también las que más yo quiero.
Disculpas finalmente a ti, Manel, por haber sido motivo de escándalo. Espero que no se vuelva a repetir para que puedas seguir mi blog sin sentir vergüenza ajena.
Un abrazo.
Santi