Se fue mi compadre Marc

Lo peor de hacerte mayor no es que vaya mermando la salud,  la movilidad se vaya reduciendo, al igual que las capacidades cognitivas. Y que vaya aumentando el número de pastillas que te ves obligado a consumir.
Lo verdaderamente desagraable del paso del tiempo es que no para de crecer tu lista de seres queridos que se han ido.

Esta vez le ha tocado a mi compadre Marc (Marc-Antoine Archer), ccompadre mío por ser yo el padrino de su hija Elena.Según sus propias palabras, yo era amigo, amigo.

En estos momentos ignoro las causa pero sí seé que han sido naturales y de forma repentina.

Afortunadamente, como comenté hace tiempo, la desfrontalización que sufro por causa de la lobotomía de mi córtex frontal, me impide sufrir y experimentar cualquier tipo de emoción o sentimiento como es el caso de la tristeza.

He hablado varias veces de Marc en este blog ya que compartimos muchas experiencias juntos.

En particular, nuestra aventura haitiana en la que yo estaba en nómina del INEM y lo aprovechamos para intentar pillar un pedazo de la tarta que la Administración destina a ayuda al desarrollo.

Lamentablemente aquel negocio no tuvo éxito por mi dependencia familiar y por la dificultad de encontrar la necesaria financiación para nuestros `proyectos. de energías renovables.
Pensando sobre esta entrada, se me ha ocurrido, con el debido respeto, especular que a estas horas Marc se encontrará en la Casa del Padre con mi madre y ella le preguntará
- Qué haces aquí Marc? si tú eras demasiado joven.
-Sufrí un patatús más grave que el de Santi hace nueve años
- Pues mi Santi se llevará un gran disgusto cuando sepa que te has ido. Hablaré con el Jefe para que se lo haga más llevadero.
-No se preocupe que Santi ya ha escrito en su blog que está lobotomizado y ni siente ni padece.
- Y cómo habrán quedado tu mujer y tus hijas?
-Pues ya iremos juntos a ver al Jefe para que no les vaya mal

Marc con una compañera de la Facultad en octubre de 2016